"Cuando la gente quiere que diga algo sobre esto, no puedo decir cuándo o si acabará en otras plataformas, no es mi trabajo",
dijo Spencer a Eurogamer. Spencer añadió:
"Mi trabajo no es hablar en profundidad de los juegos que no son de nuestra propiedad. Tengo una cierta relación en lo que se refiere a esta versión de Tomb Raider que anunciamos, y me siento muy bien acerca de nuestra relación a largo plazo con Crystal y Square. Es lo que veo. Si fuese un poseedor de PlayStation, de repente sentiría como que la franquicia se ha ido. Pero no he comprado la IP. No compré el estudio. No es mío. Al igual que Dead Rising o Ryse, ya veremos lo que pasa con el juego. No soy dueño de cada entrega de Tomb Raider. No soy dueño de ello. No puedo hablar de la franquicia de esa manera. Puedo hablar sobre el acuerdo que tengo."
Preguntado sobre qué supone el acuerdo, Spencer dijo lo siguiente:
"Las próximas navidades tendré en exclusiva a Rise of the Tomb Raider lanzándose para Xbox, esto es, para Xbox One y Xbox 360. No trato de engañar a nadie acerca de adónde queremos ir a parar con todo esto. Lo que ellos [Square-Enix] hagan con la franquicia a largo plazo, no es cosa mía. No es algo que controle. Así que todo lo que puedo hablar es sobre el acuerdo que he cerrado. No se a dónde irá a parar Tomb Raider después de ésto."
Al ser preguntado por qué duración tenía el acuerdo y si podía decirlo, Phil Spencer se negó a contestar:
"No. Y no es porque intente timar a nadie. Es un acuerdo entre el socio y nosotros. La gente me pregunta también cuánto hemos pagado. Hay determinadas cuestiones de las que no voy a hablar porque son asuntos estrictamente comerciales entre el socio y nosotros. Obviamente, el acuerdo tiene una duración, ya que no he comprado la IP de Tomb Raider para la perpetuidad."
Fuente: GamingWorld
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