PS4 y Xbox One llevan CPU's modernas. Tener memoria más rápida no es útil si el procesador se detiene.

David Miles, CTO de BabelFlux, compañía tras la tecnología Navpower, fue preguntado acerca de cómo el middleware se beneficia de características específicas de las nuevas consolas, por ejemplo, la memoria unificada GDDR5 de la PS4 y la memoria eSRAM extremadamente rápida de la Xbox One, con un ancho de banda de 204 Gb/s:

"A pesar de que el ancho de banda de la memoria tanto de PS4 como de Xbox One es fabuloso, la cuestión crucial para nosotros es que ambas máquinas cuentan con diseños de procesador muy modernos que incluyen características tales como la ejecución fuera de orden.

Es algo crucial para cualquiera que escriba sistemas de "path-finding" o de IA, porque es raro poder ejecutar una porción significativa de código sin tener que tomar una decisión basada en los datos que estás cruzando, y alternativamente irse a ejecutar una parte diferente del código. Por ello, tener la memoria más rápida del mundo no es útil si el procesador se detiene cuando quiera que sea que tengas que unir una parte del código con otra".


Fuente: GamingWorld